Si hay algo sobre lo que debatimos los vecinos de Valdegovía es sobre el estado de las carreteras que disfrutamos o, mejor dicho, padecemos. Es cierto que desde hace años se ha ido mejorando el trazado y firme de la A2622, la carretera que discurre entre Villanañe y Bóveda, eliminado curvas peligrosas y mejorando su ancho.
Sin embrago, no deja de sorprender el estado calamitoso de la vía que soporta más tráfico en Valdegovía. Me refiero a la carretera A2625, la antiguamente conocida como carretera del Señorío de Vizcaya que discurre desde Osma hasta Puentelarrá. Y por extensión, me atrevo a referirme a la A4323 de Puentelarrá a Miranda de Ebro.
Se trata de una carretera que presenta un tráfico muy importante y no solo de turismos sino también de camiones, vehículos agrícolas y ciclistas. Coincidiremos todos que el estado de conservación, trazado y firme es lamentable, especialmente en el tramo de Osma hasta Espejo pero también de Puentelarrá a Miranda. Es sorprendente que la Diputación de Álava, responsable de su manteniendo, no hayan realizado mejora alguna en su trazado en los últimos 40 años. Parcheos constantes, firme deteriorado, rodadura en malas condiciones. Una carretera con curvas complicadas y cambios de rasante que podrían mejorarse sustancialmente con una inversión modesta.
No se trata de hacer una autopista, pero sí de mejorar el ancho de la calzada para que ciclistas, tractores y turismos puedan discurrir de una forma más segura. Se trata de eliminar 3 o 4 cambios de rasante y modificar algunas curvas. Y por supuesto, asegurar un firme en buenas condiciones.
Durante mucho tiempo se ha plateado la necesidad de mejorar el acceso a Vitoria a través de Salinas de Añana, buscando diferentes soluciones a la Tejera. A todos nos gustaría un mejor trazado, pero hay que reconocer que el costo parece elevado y las soluciones técnicas complejas.
Bien al contrario, mejorar la A2625 y el tramo hasta Miranda, lejos de costoso, parece sencillo y reforzaría la seguridad del tramo, evitando accidentes y desgracias.
La Diputación de Burgos mejoró hace años la A2625 en los tramos de su competencia, entre Osma y el alto de Orduña y entre Puentelarrá y Pancobo, ganando anchura, mejorando el firme y dejando una carretera a la altura de nuestro siglo. Parece que nuestra Diputación de Álava ha olvidado que esta carretera dejó de ser del Señorío de Vizcaya y pasó a ser de su competencia hace mucho tiempo. En todo caso, se lo recordamos desde este foro por si tiene a bien considerarlo en sus planes de mejora.
Álava siempre tuvo fama de tener las mejores carreteras de España, a años luz de las de nuestros vecinos burgaleses. Pero esa fama ha cambiado en las últimas décadas producto de una menor inversión por parte de la Diputación. ¿Qué razones para este freno inversor? ¿Por qué se ha reducido tanto la inversión en carreteras? Yo me atrevería a dar dos razones. La primera es el alto porcentaje de gasto social consolidado que tiene el presupuesto de la Diputación. Basta decir que el 50% del presupuesto de la Diputación es para Bienestar Social y tan solo el 11% para infraestructuras, incluido mantenimiento. Y la segunda razón es que el 70 % de la recaudación de la hacienda alavesa acaba en la hucha del Gobierno Vasco que lo deriva a otros destinos.
Es decir que el margen presupuestario para actuaciones en infraestructuras viarias es realmente reducido. Es algo que habría que cuestionarse porque la inversión en infraestructuras es clave para la creación de riqueza.
Y de carreteras físicas a las carreteras de Internet. ¿Para cuándo la fibra óptica en todo Vadegovía? Pues parece que llega, el despliegue va avanzando, pero todavía muchos de nuestros pueblos carecen de fibra óptica. En el momento de escribir este artículo están desplegando la fibra en la parte alta del municipio. ¿Estará operativa en 2020? Quizás sí, estupendo, solo que con 10 años de retraso. Me gustaría recordar que sin buenas carreteras físicas es difícil establecer población y frenar el despoblamiento y aún más es hacerlo si no conseguimos que el acceso a Internet sea de una calidad similar a la existente en las ciudades.
Crucemos los dedos para que veamos una mejora de ambas infraestructuras en fechas próximas. Mientras tanto seguiremos circulando despacio y con peligros en ambas carreteras. ¡Qué remedio!
por Gema 07/11/2020
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